El dinero puede comprar adornos, pero no cultura
El dinero puede comprar libros, pero no un cerebro
El dinero puede comprar comida, pero no apetito
El dinero puede comprar compañía, pero no una verdadera amistad
El dinero puede comprar una banca para el templo, pero no el cielo
El dinero puede comprar un crucifijo, pero no un salvador...
Lo que el dinero no puede comprar Dios te lo da gratuitamente.
Solo necesitas pedírselo de todo corazón.