Estas diferencias pueden ser causa de una importante experiencia negativa.
«Ya hicimos los planes. Los chicos están entusiasmados. Deberíamos ir al lago», dice el marido.
«No sabemos cuánto tiempo más vamos a tener a mamá con nosotros, y quiero estar con ella», contesta la esposa.
«Si no vamos ahora, ¿cuándo volveremos a tener tiempo para hacerlo?»
«Todo el año hemos estado esperando esta semana de vacaciones. Los chicos no van a estar contentos pasando una semana en casa de la abuela. Nos van a volver locos. Además, tu madre no está tan enferma. Y tu hermana, que vive amenos de un kilómetro de ella, puede encargarse de cuidarla.»
«Es mi madre también. Quiero estar con ella.»
«Puedes hablarle por teléfono todas las noches. Y tenemos el proyecto de encontrarnos en la reunión familiar de Navidad, ¿recuerdas?»
«Para eso faltan cinco meses. Ni siquiera sé si para entonces aún estará viva. Además, me necesita y quiere que esté con ella.»
«La están cuidando perfectamente. Y los chicos y yo también te necesitamos.»
«Mi madre es más importante que pescar.»
«Tu esposo y tus hijos son más importantes que tu madre.»
Como no están de acuerdo, durante esas idas y venidas finalmente pueden ser causa de una importante experiencia negativa.
Podría constituir una fuente de disputa por mucho tiempo, e incluso dividir a la familia. Muchos matrimonios alguna vez perfectos, apacibles, espontáneos y afectuosos se han deteriorado hasta llegar a la hostilidad por causa de una serie de incidentes de este tipo.
El esposo y la esposa ven la situación de modo diferente. Y esa diferencia puede dividirlos, separarlos, introducir malentendidos en la relación. O bien acercarlos en un nivel más alto.
Si han cultivado los hábitos de la interdependencia efectiva podrían afrontar sus diferencias en el marco de un paradigma totalmente distinto, comunicándose en un nivel superior.
Como tienen una abundante cuenta bancaria emocional, en su matrimonio existe la confianza y la comunicación abierta.
Como piensan en ganar/ganar,creen en una tercera alternativa, en una solución mutuamente beneficiosa, preferible a todas las propuestas en principio.
Como escuchan empáticamente y procuran primero comprender, crean dentro de sí y entre ellos un cuadro amplio de los valores y preocupaciones que hay que tener en cuenta para tomar una decisión.Y la combinación de esos ingredientes crea un ambiente ideal para la sinergia.
En el budismo, esto se llama «el camino del medio».
En este caso, «el medio» no significa transacción; significa algo más alto, como el vértice superior de un triángulo.
Al buscar el camino «del medio» o superior, esposo y esposa comprenden que su amor, su relación, forma parte de su sinergia.
Al comunicarse, el esposo siente real y profundamente el deseo de su mujer, la necesidad que ella tiene de estar con su madre. Comprende que quiere aliviarlas obligaciones de la hermana, que es la principal responsable del cuidado dela enferma. Comprende que realmente no saben por cuánto tiempo más estará con ellos, y que sin duda es más importante que pescar.Y la esposa comprende profundamente el deseo del esposo de que toda su familia esté junta, y de procurarles a los chicos una gran experiencia. Tiene presente la inversión realizada en lecciones y equipos de pesca para esas vacaciones, y la importancia de crear buenos recuerdos conjuntos.De modo que reúnen todos esos deseos.
No se sitúan en los lados opuestos del problema. Comparten un mismo lado mientras examinan la cuestión,comprendiendo las necesidades y creando una tercera alternativa que habrá de satisfacerlos.
«Tal vez podamos pensar en otro momento de este mes para que visites a tu madre», sugiere el marido. »
«Yo podría hacerme cargo de la casa durante el fin de semana y después conseguir que alguien me ayudara de manera que tú puedas ir. Sé que para ti es importante.»
«O podríamos instalarnos y pescar en un lugar que esté cerca de la casa de tu madre. No sería tan bonito, pero de todos modos haríamos una vida al aire libre y también satisfaríamos otras necesidades. Y los chicos no se subirían por las paredes. Incluso podríamos proyectar actividades de recreo con los primos, los tíos y las tías, lo cual sería una ventaja adicional.»