Se debe asumir la responsabilidad por tu propio destino, teniendo en cuenta por supuesto que existen hechos fuera de tu control. Debes realizar las acciones que están a su alcance para influir en su destino y no perder tiempo lamentando aquellas cosas que no se pueden cambiar, sino rehacer tus planes según cómo se presenten las circunstancias.
Si acatas el principio de responsabilidad no andarás fijándote en lo que hacen los demás ni siquiera para echarles la culpa de lo que te pasa a ti.
Desconozco a su autor
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